1. ** Control y precisión **: Sentarse en un banco proporciona estabilidad y control sobre el movimiento. Esto le permite centrarse más en los músculos específicos (el pectoral mayor) y menos en la estabilización del cuerpo, lo que puede conducir a una mejor forma y un riesgo reducido de lesiones.
2. ** Rango de movimiento **: La posición sentada puede ayudarlo a lograr un rango de movimiento completo, que es crucial para maximizar el crecimiento muscular y las ganancias de fuerza. Los brazos se extienden completamente, lo que permite un estiramiento más profundo y una contracción de los músculos del pecho.
3. ** Aislamiento de músculos **: Al sentarse, puede aislar los músculos del pecho de otros músculos de la parte superior del cuerpo. Esto ayuda a atacar específicamente al pectoral mayor, por lo que es un ejercicio efectivo para aquellos que se centran en el desarrollo del pecho.
4. ** Selección de peso **: Como está sentado, tiene más control sobre el peso que elija. Esto permite un ajuste más preciso de la resistencia, lo que le permite comenzar con pesos más ligeros y aumentar gradualmente a medida que la resistencia mejora, lo cual es beneficioso tanto para principiantes como para los levantadores avanzados.
5. ** Corrección de postura **: El banco proporciona un entorno de apoyo que fomenta la postura adecuada. Esto es particularmente importante al realizar ejercicios que requieren una cantidad significativa de fuerza, como los movimientos presionantes, ya que ayuda a mantener la alineación y reduce el riesgo de compensar con otros grupos musculares.
6. ** Flexibilidad y accesibilidad **: La posición sentada puede ser más fácil en la parte baja de la espalda en comparación con los ejercicios permanentes, por lo que es una opción más accesible para las personas con ciertas condiciones o lesiones de espalda. También se puede ajustar para acomodar varios niveles de aptitud física y disponibilidad de equipos.
7. ** Recuperación **: Después de un entrenamiento, la posición sentada puede hacer que sea más fácil volver a una posición cómoda sentada o acostada, lo que podría ser más descanso que estar inmediatamente después de ejercicios intensos.